Matteo Manassero conquista el BMW Pga Championship y con esta asombrosa victoria se convierte en el número uno de Europa y el número 30 del mundo.
Después de cuatro días, 72 hoyos y 278 golpes (-10) en el largo y difícil recorrido del Wenthworth Club, de Virginia Water, en Surrey, Inglaterra, Matteo logra encontrar la concentración y la fuerza para vencer al escocés Marc Warren y al inglés , Simon Khan (ganador en 2010), en un desempate en el hoyo 18 con la fórmula de muerte súbita, por lo que el que no empate el mejor resultado queda eliminado.
El primero en ceder es Warren, quien en el primer hoyo golpea la bola hacia la derecha, hacia los arbustos. En cambio, Manassero y Kahn se retan de nuevo por tres hoyos, un niño y un hombre que le doblan la edad, ambos decididos a no darse por vencidos. Al final Matteo logra ser más efectivo, más preciso en putts decisivos. En el cuarto hoyo del playoff Khan se mete al agua y Matteo se lleva el green de par 5 de 2 golpes: dos putts son suficientes para una más que merecida victoria, la cuarta de su reciente y brillante carrera. Un éxito que confirma el altísimo nivel de su juego, pero también la fuerza de carácter y la madurez de este chico que ha ganado dos play-offs de dos disputadas en su carrera.
Mirándolo, tan decidido, tan tranquilo, parece mayor de su edad, aunque su sonrisa delata toda la frescura de sus veinte años. Y luego están las estadísticas para recordarnos que es poco más que un adolescente: el ganador más joven del Campeonato BMW Pga en 58 años de vida, como escribe el sitio web del Tour Europeo. Un logro deportivo, pero también un gran cheque de bolsillo. : 791,660 euros que, sumado a lo ganado este año, le sitúan en un total de 1,055,491 euros, en lo más alto de la Race to Dubai, la clasificación del European Tour, por delante de Graeme McDowell con 1,029,186 euros.
Son unos resultados realmente increíbles, conseguidos en Italia solo por Costantino Rocca (y no a los veinte años), con 5 victorias en su carrera, incluido un Pga Championship en el '96.
Un éxito que trae consigo una serie de beneficios como el acceso a los torneos más importantes, como The Open Championship para los próximos tres años, el US Open 2013 y los próximos World Golf Championships.
“Soy el hombre más feliz del mundo -dijo al final de la carrera-, ha sido una semana fantástica y estoy agradecido a este maravilloso público que nos ha seguido en estos días”.
Más de cien mil espectadores acuden al césped inglés dispuestos a aplaudir a sus favoritos incluso en condiciones climáticas desesperadas, ya que el segundo día llueve, hace viento y hace seis grados centígrados. El apoyo es en gran parte para Lee Westwood, el campeón inglés que se mudó a Florida este año para jugar permanentemente en la gira estadounidense. Sin embargo, Westwood vuelve a ser traicionado por el putter y, a pesar de estar en cabeza tras 54 hoyos, al final se tiene que conformar con la novena plaza. Mismo destino para Francesco Molinari, en lo más alto tras 36 hoyos y luego desbordado por una mala tercera vuelta. Al final cierra con un honroso -7 y un muy digno top ten. Decimonoveno puesto para su hermano Edoardo Molinari, 62º puesto finalmente para el cuarto italiano que queda en el campo, Alessandro Tadini. Son excelentes resultados para el golf italiano, dado el escaso número de practicantes en comparación con los países anglosajones o España. Logros que demuestran el gran nivel de la escuela italiana y que también son un buen augurio para el destino olímpico de Río de Janeiro.
