Nunca bajes la guardia cuando Edoardo Molinari salta al campo, porque el turinés de 33 años siempre es capaz de sorprender. Habíamos pensado que el Joburg Open, que se disputaba en el Royal Johannesburg & Kensington Golf Club, era un evento menor y que Edoardo, recién llegado de una estupenda actuación en Dubai (noveno), participaría sobre todo para seguir entrenando. Pero no. El ingeniero italiano que, como profesión, eligió el golf, tomó la delantera el primer día y después de 36 hoyos sigue liderando la clasificación, colocándose en la pole position para ganar el título y sobre todo la clasificación para el Abierto Británico. Y sus rivales no son golfistas de segunda, empezando por Charl Schwartzel, nueve veces ganador del circuito, número 18 del mundo, campeón del Masters de 2011.
Edoardo obviamente tiene hambre de juego y de victorias, después del largo ayuno al que se vio obligado a someterse debido a dos operaciones, una en la muñeca y otra en la mano izquierda, con el consiguiente descenso del puesto número 20 del mundo, al 220. Bocas amargas para un deportista, que sin embargo no echó a perder el apetito de laureles de este chico inteligente y decidido. Quizás, en cierta medida, incluso la redención de Henrik Stenson inspiró a Dodo y le confirmó que el golf, si se practica con seriedad y dedicación, puede dar las satisfacciones esperadas. Como Siddartha debemos esperar, meditar, ayunar. Molinari, entre otras cosas, tiene de su lado una de las armas más importantes de este deporte: el putter. El golf es un juego de concentración, donde los tiros espectaculares de 300 metros cuentan tanto, si no menos, que ese tramo de un metro que separa la bola del hoyo y que marca siempre la distancia entre el campeón y el mediocre.
Edoardo ya tiene un palmarés que demuestra de lo que está hecho, con dos victorias en el Circuito Europeo y un mundial emparejado con su hermano Francesco Molinari. Su mejor actuación sigue siendo el Open de Escocia de 2010 donde, con un final espectacular y con algunos putts metidos en el hoyo en los momentos decisivos, consiguió ganar y conquistar el comodín de la Ryder Cup. Impresión de estar ante un campeón con un gran futuro. Luego el destino tuvo su mano y varios problemas físicos. Esta temporada, sin embargo, comienza con el ritmo adecuado.
No sabemos cómo acabará en Sudáfrica, pero la impresión es que hemos vuelto a encontrar a un gran jugador. El propio Molinari muestra plena confianza en su juego: “todavía quedan dos vueltas por delante –dice– pero me gusta mucho cómo estoy golpeando la pelota. Es importante seguir así”.
Una buena ubicación en este torneo es importante porque puede clasificarse para el 143° Open Championship que se llevará a cabo en el Royal Liverpool del 13 al 20 de julio. La clasificación actualmente ve a Edoardo Molinari a la cabeza con -11, flanqueado por Craig Lee con la misma puntuación. Esta noche todo pudo haber cambiado y mañana decidimos. En definitiva, son 36 hoyos para seguir y sufrir. No hay que olvidar que también está en el campo Lorenzo Gagli por Italia, que está haciendo un espléndido torneo y, de momento, es 18º con -8; Francisco Laporta (-1); Andrea Paván (+1); Marco Crespi (+3). Están en juego 1 millón 300 mil euros, de los cuales 206 mil euros para el primero.
