Se suponía que iba a ser una velada de cultura y entretenimiento y en cambio la inauguración del Verano en MAXXI, el Museo de las Artes del Siglo XXI, se ha convertido en el peor talk show basura. Para Alessandro Giuli, que observó sin pestañear los arrebatos sexistas y las palabrotas de Vittorio Sgarbi por el bien de un Morgan moderadamente provocador, el bautizo de #estatealMAXXI, el primero bajo su presidencia, se ha convertido en una pesadilla. Una velada que transcurrió casi en silencio el 21 de junio saltó al centro de la polémica cuando un video -que se hizo viral en las redes sociales- dio a conocer la mala actuación. Resultado: protestas del público que acudió a la cita con Piano Solo pensando en participar en un debate cultural sobre arte y música y estaba inevitablemente decepcionado; protestas de los propios empleados de MAXXI que escribieron una carta a Giuli pidiéndole que protegiera la dignidad del museo; protestas del Partido Demócrata que cuestionaron al Ministro de Cultura Sangiuliano mientras Carlo Calenda estigmatizó la pesada vulgaridad de la actuación. En resumen, un alboroto. Y para el nuevo presidente Giuli un bautizo bochornoso: había prometido llevar la cultura derechista, sacrificada durante años, al MAXXI. ¿Es eso lo que quiso decir?
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Giuli en Maxxi se deja arrollar por la vulgaridad y el museo cae en un talk show basura
Una velada en el MAXXI con Sgarbi y Morgan se convierte en un caso: blasfemias, sexismo, vulgaridad. Pero el nuevo presidente no reacciona y se desatan protestas