El Tribunal Constitucional alemán declaró legítimo el programa de compra de valores de países en crisis (OMT)? lanzada por el BCE en 2012, rechazando el recurso presentado por un grupo de ciudadanos y desactivando una potencial mina tan solo dos días después del referéndum británico sobre la salida de la Unión Europea.
De hecho, la luz verde dada por los jueces constitucionales alemanes permite no socavar la confianza de los mercados en la eficacia de una intervención del banco central de Frankfurt para sofocar las turbulencias financieras desencadenadas por un posible Brexit. Se había dirigido a los jueces de Karlsruhe un grupo de políticos, ciudadanos y asociaciones “euroescépticos” quien cuestionó la legitimidad del programa desarrollado en implementación de la famosa declaración de Mario Draghi de que el BCE haría "lo que sea necesario" para defender el euro bajo el ataque de la crisis de la deuda.
Los OMT (transacciones monetarias directas) se suponía que permitirían al banco central europeo comprar valores ilimitados de países en crisis que se comprometerían con un programa económico acordado con sus socios europeos. De hecho, nunca se utilizaron porque el anuncio del plan por sí solo ayudó a calmar los mercados.
