La asamblea general de Elettricità Futura, la principal asociación del sector eléctrico italiano perteneciente a Confindustria, tomó nota de la voluntad de Agostino Rebaudengo dejar la presidencia. El mandato expiró en 2026, pero el rey Rebaudengo decidió dejar espacio a un nuevo presidente. ¿Acto voluntario o inducido? Hay muchos "rumores" circulando. La asamblea reunida en Roma constató también que ya se ha iniciado el procedimiento para identificar al próximo presidente. La cuestión de la rotación en la cúpula había estado sobre la mesa durante días. Pero la asamblea reconoció la "sensibilidad" de Re Rebaudengo al haber sabido interpretar el debate interno solicitado recientemente por 8 empresas entre los más de 500 miembros.
El futuro de la electricidad y el choque por la transición
Evidentemente, la discusión se desarrolló en torno a la capacidad de Elettricità Futura para seguir haciendo crecer el sector eléctrico. Enel, Edison, A2A, Iren, Sorgenia, habrían sido ellos quienes pidieron el cambio de ritmo. Según algunas reconstrucciones periodísticas, la presidencia de Re Rebaudengo habría entrado en conflicto con la del presidente de Confindustria Emanuele Orsini. En pocas palabras: el primero está demasiado convencido de la transición verde, el segundo es mucho menos verde. El informe oficial de la asociación dice que los socios que asistieron a la reunión apreciaron el trabajo del presidente saliente. Pero parece solitario Bon Ton institucional para abarcar diferentes visiones no ajenas a la política. En cualquier caso cierran cuatro años desafiantes en medio de programas de evolución energética asistidos por fondos públicos, pero también opuestos por medidas ejecutivas contra las que las empresas eléctricas han luchado. “Primero nos enfrentamos a las consecuencias de la emergencia sanitaria del coronavirus y luego a los impactos de la emergencia energética, fuimos testigos de los precios de la electricidad más bajos y más altos de la historia de la posguerra y de la sucesión de tres gobiernos diferentes”, afirmó Re Rebaudengo.
Ex presidente de Assorinnovabili, que luego se convirtió en Elettricità Futura, el directivo abandona una asociación en crecimiento con un plan eléctrico hasta 2030 que pretende garantizar 80 GW de energías renovables para el país. Giorgia Meloni y sus ministros no apoyaron adecuadamente ese plan, como pedían los industriales y se desató una batalla muy dura. Una vez más es el espejo del país. Orsini, por su parte, no oculta su oposición a la opción verde de Elettricità Futura: "Transiciones como estas cuestan y costarán al sistema del país miles de millones", afirmó cuando asumió el cargo al frente de Confindustria. Mientras tanto, la asociación se ha opuesto frontalmente al gobierno por la provisión de zonas adecuadas u otras iniciativas que frenan la descarbonización. En los últimos años, la asociación ha elaborado numerosos estudios que han concienciado al público en general sobre los beneficios de la electrificación y la transición energética. Cometió un error o eso no es suyo. misión? Sólo queda, por tanto, esperar la elección del nuevo líder y ver qué pasa con el Plan Eléctrico 2030 con 80 gigavatios de energías renovables. Italia está llena de archivos de documentos desconocidos. Una piedra sobre el futuro.