Los alemanes no quieren saber más.. Desde lo más alto de su liderazgo económico dentro de la eurozona, los ciudadanos de Angela Merkel están cada vez más preocupados por el futuro de la unión monetaria, especialmente con respecto a la situación en Grecia. Frente al cual, según la última encuesta realizada por Financial Times, ya no se permiten descuentos.
De hecho, solo el 26% de los alemanes piensa que Atenas debe permanecer en Europa a toda costa, argumentando que "otros miembros de la eurozona deberían hacer más". a diferencia de lo explicado por italianos y españoles, que probablemente en virtud de un vínculo de solidaridad con el pueblo griego declaró al 77 % (italianos) y al 57 % (españoles) que todavía quieren a Grecia en el euro, añadiendo también cierta confianza en el hecho de que lo que realmente podría suceder (88 y 70%).
En cambio, el 54 % de los alemanes piensa que Atenas, a pesar de los esfuerzos realizados, debería abandonar la eurozona. De ahí que la canciller Angela Merkel se encuentre cada vez más en una encrucijada, ante una opinión pública cada vez más reticente a conceder ayudas a Atenas, que mientras tanto debe reducir su gasto en 12 millones de euros en los próximos dos años para satisfacer a la troika. Cuya troika (FMI, BCE y UE) ha suspendido por ahora el pago del último tramo de ayuda financiera del plan de 174 millones destinado a evitar el default griego.
