Con la llegada de Emmanuel Macron al Elíseo "acabarán, espero, las cumbres europeas unidireccionales, en las que Merkel daba la línea doctrinal y los demás jefes de Gobierno daban las ruedas de prensa". Así lo afirmó Romano Prodi, expresidente del Consejo Italiano y de la Comisión Europea, en una entrevista publicada hoy en La Repubblica.
“El motor franco-alemán volverá a funcionar con dos pistones -añadió- como debe ser”. De esta forma, según Prodi, “será capaz de coagular el consenso de otros grandes países, como Italia y España, restableciendo la dialéctica que ha hecho avanzar a Europa”.
En cuanto a Macron, “es un liberal francés –subrayó el ex primer ministro–, una economía libre pero dirigida por un Estado eficiente: una idea que extiende a toda Europa. Me parece correcto defender el interés europeo más que el meramente nacional”.
Prodi explica entonces la desaparición de los partidos políticos tradicionales en Francia señalando que, “con la única excepción de Alemania”, en toda Europa “el choque ya no es entre el proletariado y la burguesía sino entre las clases urbanas cultas y las periferias subculturales. Los viejos partidos se convierten en máquinas electorales que ya no tienen función social, son incapaces de comprender y representar las contradicciones de la sociedad”.
