Los transalpinos tienen su propio PayPal. El nuevo sistema de pago online, que también funciona en smartphones y tabletas, se llama PayLib y pronto permitirá comprar billetes de tren en la SNCF. Los creadores son nombres bastante conocidos: Bnp Paribas, Société Générale y La Banque Postale.
Una alianza sin precedentes, dado que los tres competidores no tienen por costumbre colaborar. Sin embargo, la urgencia de la situación justifica el repentino armisticio. Se trata de unir fuerzas en la lucha contra PayPal, el principal sistema de pago online del mundo y también líder indiscutible en Francia, con 7 millones de cuentas corrientes. Y es también una adaptación a los retos tecnológicos, con las nuevas generaciones de monederos electrónicos llegando a Europa a finales de 2013, con patrocinadores más que convincentes como Google, Visa y Mastercard.
PayLib se centra en la simplicidad y la seguridad. Parece que los usuarios, en lugar de tener que teclear los 16 dígitos de la tarjeta, sólo necesitarán un nombre de identificación y una contraseña para pagar.
También hay ventajas para los que venden: PayLib se llevará una comisión inferior a la que pide PayPal, un 3% en cada transacción.
Los impulsores de la iniciativa esperan involucrar a otros grupos bancarios. Pero los 11 meses de preparación no fueron suficientes para convencer a otros gigantes del sector, como Crédit agricole, BPCE y Crédit mutuel. El objetivo es crear un estándar que todos se verán obligados a cumplir.
