El Tribunal Constitucional francés ha invalidado el polémico impuesto del 75% sobre el impuesto sobre la renta por encima del millón de euros, uno de los pilares de la ley de presupuestos de 2103 aprobada por el gobierno socialista del presidente François Hollande. que ya ha provocado muchos "éxodos fiscales", incluido el de Gerard Depardieu.
A través del primer ministro Jean-Marie Ayrault, el Gobierno ha anunciado su intención de proponer "un nuevo sistema de acuerdo con los principios establecidos en la decisión del Tribunal Constitucional, que se presentará en el marco de la próxima reunión financiera".