Adiós Facebook, sígueme en Twitter. El editorialista de Forbes Tim Maurer, quien en un artículo de la revista estadounidense explica a los lectores las siete razones por las que deberían abandonar la red social de Mark Zuckerberg y encontrar una nueva dimensión (como lo expresan muchas tendencias recientes) con Twitter e Instagram.
“Nadie me ha ofendido -aclara enseguida Maurer-, no he tenido malas experiencias ni me aterra la idea de un Gran Hermano que me persigue y me acaba volviendo paranoico”. Así que aquí está la primera razón: “Facebook me quita tiempo de la vida, y el tiempo es dinero”. No es que twittear o publicar fotos en Instagram genere ganancias, pero objetivamente el tiempo perdido en la plataforma de mil millones de usuarios corresponde a horas enteras del día en lugar de clics rápidos.
“La segunda razón es que la mayoría de mis amigos de Facebook en realidad no son amigos. Ni siquiera son enemigos, no es que les desee el mal, pero los factores que nos llevan a comunicarnos solo por internet obviamente no son geográficos". La tercera razón es compartir fotos, el orgullo de Instagram (siempre propiedad de Zuckerberg, de todos modos) y que está perdiendo atractivo en Facebook: “Hay mejores plataformas para compartir fotos: ahora casi todo el mundo lo hace desde Instagram, y luego las vuelve a publicar en Facebook. Pero también podríamos hacerlo directamente y solo en Instagram, ¿no?”.
En el cuarto puesto del ranking de Forbes hay un motivo que probablemente muchos de nosotros hemos pensado al menos una vez, entre el fútbol o la trifulca política, las guerras de me gusta/a diferencia y varios comentarios, incluso ofensivos, gracias a la protección de la pantalla de los uds: “Facebook saca lo peor de las personas”.
En quinto lugar, la (perdedora) comparación con Twitter: “Aprendí más de Twitter – confiesa Maurer -. Twitter es a Facebook lo que una biografía es a una novela. Sé que no tiene nada de malo leer ficción, pero confieso que (quizás por error) me siento un poco culpable cuando paso tiempo leyendo algo que no tiene (o no tendrá) dimensión real. Twitter es una fuente de noticias reales, es un recurso, no un concurso de popularidad".
Luego, la presencia excesiva de publicidad: “La presencia de anuncios en Facebook se está volviendo ridícula – sentencia Maurer -, ¿realmente soy yo el único que lo nota?”. Finalmente, la séptima razón: “Menos es más, menos es más. Quiero hacer la vida más fácil, reducir su coste (no sólo económicamente) y mejorar su calidad. Quiero minimizar la cantidad de cosas que me distraen de las cosas importantes. Menos es el nuevo más".
Adiós Facebook. Sigueme en Twitter: @TimMaurer.
