Italia es verdaderamente “muy grande para fallar“. Aparte de la rebaja, por lo tanto, no corremos el riesgo de incumplimiento. La cortesía viene directamente de Fitch, la agencia de calificación que desde ayer prometió una nueva rebaja de nuestro país, quizás un par de escalones.
eduardo parker, director gerente de la agencia, usó palabras tranquilizadoras durante las perspectivas crediticias europeas de 2012: “El impago de Italia ciertamente no es nuestra expectativa. El país todavía tiene una calificación A+: si hubiera posibilidad de quiebra le hubiéramos asignado una calificación mucho más baja. Italia tiene buenos fundamentos".
A pesar del bajo crecimiento, “el déficit es relativamente bajo, el sector privado es boyante y la balanza comercial manufacturera está bastante cerca del equilibrio”.
Y sobre todo, “a diferencia de otros países como España e Irlanda –concluyó Parker–, Italia nunca ha tenido un auge insostenible del crédito al sector privado. El país es absolutamente sistémico para la eurozona, es realmente demasiado grande para quebrar: si este fuera el caso, esperaríamos una intervención europea para evitar el incumplimiento”.
