Higienizar las fábricas y reabrirlas en cuanto el gobierno dé el visto bueno: este es el significado de un importante acuerdo que FCA y los sindicatos metalúrgicos firmaron ayer. Esta vez también está el fichaje de Fiom-Cgil y no es una novedad baladí.
El acuerdo que pone la salud en primer lugar, como anticipó el presidente de FCA, John Elkann, en su reciente carta a los accionistas, marca las pautas que guiarán la reapertura de las fábricas del grupo automotriz. Se trata de un acuerdo que se basa en dos fases: la primera es la de preparación para la reapertura de las fábricas y la segunda es la de la reanudación del trabajo cuando la emergencia sanitaria aún no haya superado por completo.
FCA avisará a los empleados con una app de todas las normas de seguridad y se higienizarán las fábricas antes de la reanudación del trabajo, que se realizará manteniendo la correcta distancia de seguridad exigida por las autoridades sanitarias. Entre los expertos consultados por la empresa también se encuentra el reconocido virólogo Roberto Burioni.
Cada empleado recibirá un kit con dos mascarillas y un par de guantes por cada jornada laboral y un par de anteojos por mes y a la entrada se medirá toda la fiebre con equipos láser similares a los que se encuentran en los aeropuertos: los mayores de 37,5 de fiebre no poder entrar a la fábrica ni a las oficinas. Se fomentará el trabajo desde casa y se eliminará la movilidad entre departamentos.
Fim-Cisl, Fiom-Cgil y Uilm han expresado su plena satisfacción por el acuerdo que marca la pauta en la fábrica para la reanudación del trabajo.
