La presión que Europa está ejerciendo sobre los gigantes Hi-Tech desde el punto de vista fiscal empieza a dar sus frutos.
Facebook anunció hoy, 12 de diciembre, que se mudará a una 'estructura de venta local' en países donde existe una oficina que brinda soporte de ventas a los anunciantes locales.
Sencillamente, los ingresos publicitarios que la red social generará con el apoyo de los distintos equipos locales vendrán contabilizada por la empresa presente en el país y ya no por la sede internacional en Dublín.
Para anunciar el punto de inflexión está Dave Wehner, director financiero de Facebook en la sala de redacción de la red social. Según ha explicado el propio técnico, "esto significa que los ingresos publicitarios obtenidos por los equipos locales ya no serán registrados por la sede internacional de Dublín sino que serán facturados por las empresas locales que operan en los distintos países". "Creemos -añadió- que avanzar hacia una estructura de ventas local brindará mayor transparencia a los gobiernos y legisladores de todo el mundo que han solicitado una mayor visibilidad de los ingresos vinculados a las ventas locales".
¿Y qué pasa con los impuestos sobre esos ingresos? Wehner no lo dice claro, pero en teoría deberían pagarse localmente, estando sujetos a la tributación de los estados individuales.
El nuevo curso debería comenzar en 2018 para luego completarse dentro de la primera mitad de 2019. En lo que respecta a Italia, el cambio debería llegar en los primeros seis meses del próximo año.
Evidentemente, se necesitarán estudios y análisis: “Cada país es único y queremos estar seguros de que estamos implementando este cambio correctamente – explicó Wehner -. Esta es una empresa importante, que requerirá recursos significativos para ser implementada en todo el mundo. Introduciremos nuevos sistemas y arreglos de facturación lo más rápido posible para garantizar una transición sin problemas a nuestra nueva estructura”.
Recordamos que hace unos días, la Comisaria de Competencia de la UE, Margrethe Vestager, había impulsado la introducción de un Legislación de la UE destinada a obligar a los gigantes internacionales a proporcionar información pública sobre impuestos pagados en países individuales, los llamados "informes país por país".
Sin mencionar, desde el punto de vista italiano, el debate en curso en la Cámara (tras el ok del senado) sobre la posible introducción de un impuesto web, es decir, un impuesto destinado a traer de vuelta a nuestro país al menos una parte de los impuestos que ahora evaden algunas multinacionales tecnológicas, en la Ley de Presupuestos de 2018.
