Aférrate a un sueño. Los italianos que participan en la Europa League se preparan para vivir una velada de mucha pasión, que podría pasar a la historia. Para caer en el póquer en los cuartos de final, se necesitarán verdaderas hazañas: por otro lado, el camino a la gloria no puede ser simple. El termómetro comenzará a subir a las 18:3 horas, cuando el Napoli se desplace al Khimki Arena para enfrentarse al Dinamo de Moscú. Sobre el papel es el compromiso más sencillo, en parte por el 1-XNUMX de la ida, en parte por el desfase técnico entre los dos equipos, en definitiva prerrogativa de los azzurri. Sin embargo, no tienen la fiabilidad como principal atributo, como ha demostrado en varias ocasiones durante la temporada: por eso, ante los rusos, tendremos que mantener los ojos bien abiertos.
“Tendremos que hacer un partido inteligente, la victoria de la ida no debe cambiar nuestra actitud – explicó Benítez. – El equipo está cargado, estamos todos unidos y tengo el control total de la situación. Estamos en carrera en tres frentes, haremos todo lo posible para ganar cada partido". No es casualidad que el español, a diferencia de lo hecho en Verona el pasado domingo, presente la mejor formación, con Callejón, Hamsik y Gabbiadini detrás de Higuaín.
Pero vayamos a los partidos más candentes, de hecho candentes. A las 19 llegará el momento del "derby" entre Roma y Fiorentina, un partido de interior o exterior que volverá a partir del empate 1-1 de la ida. Hay mucho en juego para todos pero, de momento, quien más juega es sin duda García. De hecho, los giallorossi atraviesan el momento más difícil de su gestión, no en vano, por primera vez desde que llegó a Italia, hasta su banquillo tiembla peligrosamente. “Asumo la culpa de todo, solo dejen a los jugadores en paz – gruñó el francés. – Parece que estamos fuera de todo, pero no es así. Haremos todo lo posible para vencer a la Fiorentina, siempre sale el sol después de la lluvia".
Para disipar el tabú olímpico se necesitará la mejor Roma, por lo que habrá espacio para el tridente Ljajic-Totti-Gervinho con Iturbe listo para tomar el relevo desde el banquillo. “Cuidado con los giallorossi, temo su soberbia – advirtió Montella. – Será un partido difícil, entre dos equipos que se conocen bien. Pero ¡ay de nosotros si nos dejamos influenciar por su situación!”. Los Viola están mejor desde todos los puntos de vista pero, visto el resultado de la ida, parten desvalidos. De hecho, el empate 1-1 de los Franchi les obligará a jugar para ganar, o al menos para marcar. Montella ha recuperado a Mario Gómez pero, al menos en un principio, se apoyará en la dupla Salah-Babacar, fresca y descansada tras el banquillo (por los dos) de la otra noche.
A las 21.05 será el momento de las remontadas. O al menos eso es lo que esperan el Inter y el Turín, llamados a auténticas proezas ante el Wolfsburgo y el Zenit. Los nerazzurri tienen que remontar el 3-1 de la ida, los granados un 0-2: misiones muy difíciles, pero no imposibles. “Creo mucho en eso, mientras haya esperanza siempre hay que intentarlo – el discurso de Mancini. – Ganar 2-0 no es imposible, también les dije a los chicos. La historia del Inter está llena de remontadas, y entonces sería bueno darle a la afición una gran noche de fútbol. Tendremos que ser buenos defendiendo y atacando, y luego, por supuesto, tener la buena suerte de nuestro lado". Apela a todo el técnico nerazzurro, consciente de que esta noche se decidirá una temporada.
La única chance de ir a la Champions pasa por la Europa League, por eso hasta Thohir, de Indonesia, quiso cargar el ambiente a proclamas. Para intentar la hazaña, Mancio ha convocado a todos, incluso al lesionado Shaqiri que, pese a sus problemas musculares, se sentará en el banquillo dispuesto a echar una mano en caso de necesidad. El 4-3-1-2 inicial verá a Carrizo en la portería (confirmado pese a los errores de la ida), D'Ambrosio, Ranocchia, Juan Jesus y Santon en defensa, Guarin, Medel y Kuzmanovic en el centro del campo, Kovacic en la delantera , Palacio e Icardi en ataque.
Mucha energía también en Turín, donde la empresa, en cierto modo, es aún más difícil. Zenit son técnicamente superiores y tienen más experiencia internacional. Dicho así, parecería casi imposible, pero las granadas lo creen bien. “Somos el Toro, no un equipo cualquiera – palabras de Ventura. – Tenemos que lanzar nuestro corazón sobre el obstáculo, estoy convencido de que podemos pasar. Para mí tenemos un 40% de posibilidades, y luego estará la gente de las granadas para empujarnos”. El Olímpico promete batalla: entradas agotadas por días y temporada récords de taquilla. En el terreno de juego, será el dúo Quagliarella-Maxi Lopez sacar lo mejor de Hulk y sus compañeros.
Una gran noche de fútbol para seguir soñando. Y mostrar a Europa que la hazaña de la ronda anterior no fue solo un hermoso error.