La Unión Europea solo podrá superar la crisis si no deja a nadie atrás. Este es el mensaje que ha lanzado el presidente de Confindustria, Giorgio Squinzi, hablando esta mañana en una conferencia: "O nos salvamos todos juntos o no se salva nadie".
Para el industrial número uno, "la verdadera elección es estar todos juntos en una Europa realmente unida". Y si la realización de este camino “lleno de obstáculos, pero esencial para salvar nuestra Unión Europea -añadió- se define con la expresión 'Estados Unidos de Europa', entonces debemos usar esta expresión sin miedo”.
Precisamente por eso Squinzi recordó que en los últimos días había invocado "la buena política, materia que escasea -añadió- y que nos hace mucha falta, teniendo en cuenta que o nos salvamos todos juntos o no se salva nadie".
También porque "la eventualidad de un default llevaría, solo en el primer año, a una caída del PIB de entre un 25 y un 50%" en las cuatro grandes economías de la eurozona, según las simulaciones del centro de estudios viale dell' Astronomía.
De nuevo sobre la base de estos cálculos, con la impago del euro “se desvanecerían entre 6 y 9 millones de puestos de trabajo” en cada una de las principales economías de la Eurozona y “los déficits y deudas públicas alcanzarían niveles de insolvencia inmediata, incluso en Alemania – agregó Squinzi.- Lamentablemente, los datos hablan por sí solos: si no se actúa con firmeza de inmediato, la alternativa que se avecina es la más oscura”, aclara Squinzi.
