Llegando por la tarde al paso del Brennero, unos cientos de black blocs y anarquistas llegados de Italia y de toda Europa, sobre todo de Grecia, Alemania y Austria, comenzaron a atacar a la policía, un millar de agentes, en buena parte también austriacos, quien respondió con gases lacrimógenos. Un agente resultó herido y está siendo asistido por compañeros, algunos reporteros también fueron atacados. Ellos serian decenas de manifestantes se detuvieron. Un coche de policía también fue destruido.
Después del primer ataque a la policía, los manifestantes se dispersaron por todo el pueblo. Un grupo llegó y ocupó las vías cerca de la estación de tren para evitar que las fuerzas policiales italianas y austriacas desbloquearan el cruce. Presionados por la policía, los manifestantes abandonaron las vías y se dirigieron hacia la carretera que discurre paralela. El humo y el gas lacrimógeno aún espeso. La zona de los accidentes fue sobrevolada por un helicóptero, mientras se desplegaron cañones de agua policiales.
“Los anarquistas vendrán al Paso del Brennero a crear problemas, después de que todas las intenciones quedaron claramente expresadas en la nota de prensa que circula en la red desde hace más de un mes…”, explicó un oficial de policía sin ocultar su preocupación.