El directorio de Enel, como parte de su estrategia de refinanciamiento de deuda, aprobó la emisión antes del 31 de diciembre de 2018 de uno o más préstamos de bonos, para ser colocados con inversores institucionales, por un monto máximo total equivalente al contravalor de 7 mil millones de euros.
Las emisiones, se lee en una nota, pueden ser realizadas por la filial holandesa Enel Finance International NV (con una garantía de la empresa matriz) o directamente por Enel, en relación con las oportunidades reales del mercado.
El consejo ha delegado en el consejero delegado la tarea de definir los importes, monedas, plazos y características de las distintas emisiones, teniendo en cuenta la evolución de las condiciones del mercado, con la facultad de solicitar la admisión a cotización de dichas emisiones en uno o varios mercados de la Unión Europea o en sistemas multilaterales de comercio.
En una lógica de diversificación, concluye la nota, las emisiones podrán dirigirse a inversores institucionales, comunitarios y extracomunitarios, también a través de colocaciones privadas.
