El ministro de Desarrollo Económico, Flavio Zanonato, estaría trabajando para que “una empresa tan importante no cierre ni uno solo de los centros productivos de nuestro país”. Así lo ha aclarado el propio ministro, durante una audiencia en la Cámara sobre el asunto Electrolux, siguiendo el nuevo plan anunciado por la empresa sueca.
Todo comenzó la semana pasada, cuando Electrolux convocó a una reunión urgente con los sindicatos y el gobierno para presentar un nuevo plan industrial que no incluía el cierre de la planta de Porcia. La empresa habló de un plan de inversión para su fábrica en la provincia de Pordenone, proponiendo también una mejora para la planta de Susegana en la región de Veneto y comprometiéndose a encontrar soluciones para los cuatro sitios en Italia.
La mesa se reunirá el próximo lunes 17 de febrero, cita a la que Zanonato espera "llegar con las ideas más claras". El Gobierno traerá tres propuestas, según ha informado la ministra: reconvertir el producto a una gama superior, trazar un plan de desarrollo de los mercados identificando los espacios de penetración que aún son practicables, o un proceso de reestructuración que no parte del recorte de los salarios por hora de los trabajadores.
Nadie habla de ayudas estatales. Pero el ministro mencionó un plan de inversión en investigación e innovación -que también implicaría aportes regionales- a cambio de mantener el empleo y los niveles salariales.
