Después del cierre positivo de Wall Street el viernes, cuando el índice S&P500 había tocado el máximo histórico, Asia ha comenzado bien esta semana corta (porque es navideña). El índice regional MSCI Asia Pacific subió un 0,7% para marcar el tercer día consecutivo de ganancias.
Las convulsiones de los últimos días, vinculadas a la crisis rusa, están amainando, pero están latentes. El rublo se recuperó levemente, hasta los 58 frente al dólar, y el crudo también se recuperó (57,9 $/b para el WTI – 62,2 para el Brent), tranquilizando el horizonte petrolero, tras las declaraciones del ministro de Petróleo de 'Arabia Saudita, que ve un aumento en demanda útil para consolidar precios.
El yen vuelve a sus niveles más depreciados, en 119,5 frente al dólar y la bolsa japonesa se mantiene estable (el Nikkei está justo por encima de los 17600). El índice de Shanghái, por otro lado, volvió a subir (+1,5%) y alcanzó un máximo de 4 años.
El dólar también se fortalece frente al euro, que se sitúa en 1,224 para alivio de los exportadores de la eurozona. El oro ha cambiado poco y se mantiene justo por debajo de 1200 $/onza. Los futuros de acciones en el S&P500 son ligeramente positivos.