“El nuevo director general de Banca Intesa pretende renovar la alta dirección del banco con el objetivo de que el primer banco del país se prepare para ser “menos italiano” y más “jugador global” en el mercado”. Así comienza el relato de la entrevista de Tomaso Cucchiani al Financial Times, la primera concedida tras su nombramiento como director de Intesasanpaolo. “Creo que tiene sentido – dice Cucchiani – tener algunos representantes internacionales en los primeros puestos”.
El banquero no da nombres, pero dice que se siente particularmente atraído por el talento bancario emergente en Asia. “Tenemos – continúa el número uno de Intesa – una base internacional muy importante. Ahora me gustaría hacer esta red más compacta y capaz de expresar mayores sinergias". Alrededor de un tercio de los 101 empleados del banco trabajan fuera de Italia. La estrategia, sin embargo, no incluye adquisiciones. “Olvídate de las nuevas compras –precisa-. El perímetro de Intesa es un hecho. Este no es el momento para estrategias creativas”.
La prioridad, sin embargo, sigue siendo una mayor eficiencia del capital. “Debemos asignar capital donde podamos maximizar el retorno económico. En este contexto, los factores críticos son la evaluación de riesgos, la retarificación y la mejora de la eficiencia”. Esta es la única forma de lidiar con una situación extremadamente peligrosa. El panorama crediticio, advierte Cucchiani, continúa deteriorándose. Europa está en recesión y es inevitable que, a medida que se deteriore el panorama económico, aumente el sufrimiento. El factor determinante del éxito, en este marco, para marcar la diferencia será la capacidad de hacer frente a la necesidad de capital adicional y de dotar provisiones suficientes para hacer frente a la morosidad.
