Con una población de 48 millones de habitantes y 33,5 millones de smartphones y tablets en circulación, Corea del Sur se ha convertido en el primer mercado de telefonía móvil del mundo en experimentar el punto de saturación, transformándose en un interesante laboratorio para los grandes operadores que temen un fenómeno similar en otros países desarrollados.
“Entre agosto de 2012 y el mismo mes de 2013, la cantidad de dispositivos electrónicos conectados a Internet en el mundo creció un 81%. En Corea del Sur el aumento fue solo del 17%”, revela un dossier publicado por Flurry, empresa estadounidense especializada en estudios de mercado. Este crecimiento fue, durante muchos meses, incluso casi nulo.
Casi todos los adultos de Corea del Sur tienen un teléfono inteligente. La mayoría tiene un phablet, esa nueva figura mitológica de los dispositivos móviles con pantallas de más de 5 pulgadas, una categoría a medio camino entre móvil y tablet.
Según Flurry, el 7% de la población mundial posee un phablet, mientras que en Corea del Sur la cifra se dispara al 41%. La compañía estadounidense también señala que este rico mercado está controlado en un 60% por Samsung, un 15% por LG, un 14% por Apple y un 10% por Pantech.