El rápido envejecimiento de muchos países suele presagiar problemas importantes. Una población activa cada vez menor tiene que soportar multitudes crecientes de personas mayores inactivas, las facturas médicas aumentan con la edad y la carga de las pensiones crece cada vez más. Pero, demostrando que en cada dificultad siempre hay un consuelo, el envejecimiento crea un negocio: el negocio de las casas de retiro.
Hubo un tiempo en que las familias cuidaban a los ancianos, pero, por factores económicos y culturales, ya no es así. En Italia, como en China, los lazos familiares tradicionales se están debilitando. En China, los mayores de 60 años son el 13% de la población, y en 2042 serán más del 30%. Los inversores internacionales, que ya tienen experiencia en el campo, se están moviendo para construir el negocio en China. Lástima que en Italia, donde las oportunidades son igual de grandes, este negocio, que podría generar puestos de trabajo y beneficios, siga rezagado.
http://usa.chinadaily.com.cn/business/2011-12/05/content_14212112.htm
