“Los resultados de 2011 confirman la extrema solidez del Grupo Campari”, dijo Bob Kunze-Concewitz, director general del grupo toscano, tras anunciar los datos del año pasado. Las ventas aumentaron un 9,6% hasta los 1,27 millones de euros y el Ebitda –antes de ingresos y gastos no recurrentes– alcanza los 329 millones, un 10,2% más que en 2010. El beneficio neto del Grupo también aumenta hasta los 159,2 millones de euros (+1,9%), tras haber registrado, además de un incremento en los gastos financieros netos e impuestos, también un componente de gastos no recurrentes por 4,7 millones.
"Las inversiones significativas en marketing y nuevas estructuras de distribución, junto con la actividad de innovación de productos y adquisiciones, han fortalecido aún más nuestro negocio", dijo Kunze-Concewitz. El mayor aumento en las ventas se registró en Argentina, +42,9%, gracias a los buenos resultados de Cinzano, Campari y Old Smuggle y en Alemania, donde impulsó las ventas de Aperol con un +% 23.
“De cara a 2012, nuestras previsiones siguen siendo cautelosamente optimistas“, agregó el director general de Campari, sin dejarse desanimar por un comienzo de año lento, principalmente por factores contingentes como el aumento de precios en Brasil que ralentizó las ventas y la no renovación de un acuerdo comercial en Alemania. . “Esperamos que estos desequilibrios se recuperen en lo que queda y lo más importante del año”, concluyó. Kunze.
Por último, el Consejo de Administración acordó proponer a la Junta General de Accionistas, convocada para el próximo 27 de abril de 2012, la distribución de un dividendo de 0,07 € por acción.
Alrededor de las 11.30 horas, la bolsa de Campari perdió un 3,47% a 5,46 euros por acción.
