Después de haber tocado los 11 mil hace una semana, el Nikkei, que había retrocedido tras la recuperación del yen, se ha recuperado algo hoy. La moneda japonesa ha retomado su depreciación, superando los 89, mientras en Davos hay una febril discusión en torno a la supuesta 'guerra de divisas': una guerra que se dice la inició Japón con una política monetaria que pretende acelerar la creación de dinero con la consiguiente depreciación del yen.
Pero si es una guerra, es más defensiva que ofensiva. El yen era la moneda que desde el inicio de la crisis hasta hoy más se había apreciado en sentido real, y lo que está sucediendo es una reacción comprensible a una cuota de 78 en el tipo de cambio yen/dólar (registrada el pasado otoño), cuota con el que muchas empresas simplemente no pueden vivir.
El resto de los mercados asiáticos se encuentran más o menos estables. Shanghái retrocedió a pesar de las buenas noticias sobre el PMI manufacturero de China, que subió aún más hasta 51,9. El euro se mantiene por encima del nivel de 1,33 y el oro, que no alcanzó el nivel de 1700, ha vuelto a caer hasta los 1681 $/onza.
