Facturas más bajas para las empresas. El Gobierno mira a las empresas, especialmente a las pequeñas y medianas, con el decreto Fare bis que se someterá a la aprobación del Consejo de Ministros a mediados de septiembre. Uno de los puntos clave de la maniobra será, precisamente, una nueva intervención sobre el coste de la electricidad, que sigue al alivio de 500 millones contenido en el primer decreto.
De hecho, se emitirán bonos por 3 millones de euros, que irán destinados a cubrir parte de los incentivos a las energías renovables que hasta ahora iban cargados en las facturas. En pocas palabras, por tanto, todo repercute en un choque de 3 millones anuales de electricidad, destinado a un porcentaje que fluctúa entre el 60 y el 70% en las empresas. El resto irá a parar a las familias, ya beneficiarias del anterior alivio.
El texto del Decreto Fare bis, en el que aún se está trabajando, contendrá también otras disposiciones, dirigidas a la industria y al medio ambiente. Se establecerán nuevas reglas para las jornadas de servicios y se implementará una política industrial que apunte a un mayor control sobre los sectores hacia los que dirigir las intervenciones de apoyo empresarial, con especial atención a la economía verde. También habrá una intervención en minibonos, para facilitar el acceso al crédito de las pymes. También existen una serie de ventajas fiscales para la recuperación y reconversión de terrenos contaminados, siempre que la recuperación sea realizada por un tercero.
