“Necesitamos un gobierno, de hecho necesitamos un gobierno que haga milagros. ¿Tú también viste Confindustria ayer, la situacion es dramatica. Muchos siguen creyendo que la crisis quedó atrás, pero aún la tenemos por delante”. Estas son las palabras poco alentadoras de Pier Luigi Bersani, líder del Partido Demócrata, quien habló con los periodistas durante un receso en las consultas para tratar de crear un nuevo ejecutivo. El secretario se reunió esta mañana con los representantes de los principales sindicatos.
los lideres de Cgil, Cisl, Uil y Ugl -en línea con lo ya expresado por Confindustria- dijeron que estaban en contra de un regreso inmediato a las urnas, esperando la formación de un gobierno "a toda costa" y en poco tiempo, como lo pidió el número uno de Cisl, Raffaele. Bonanni, para evitar “el riesgo de que Italia se parezca a la Alemania de Weimar”.
El secretario de la Uil, Luigi Angeletti, ha pedido la rebaja de la carga fiscal y de los impuestos sobre el trabajo y la reducción de los costes de la política, mientras que la líder de la CGIL, Susanna Camusso, ha hablado de la abolición del Imu en primeras viviendas hasta por un valor de 1.000 euros.
Mientras tanto Matteo Renzi adelantó que no estará presente en la conducción del partido prevista para esta noche “por una razón muy sencilla – dijo a la emisora Radio Toscana – fue convocado en el último momento y yo tenía compromisos previos como alcalde”. En cuanto a Bersani, “está intentando formar gobierno y espero que, por el bien de Italia, lo consiga. Mi seriedad y mi lealtad están fuera de toda duda”.
