Con una cumbre en el Palazzo Chigi entre el primer ministro Giuseppe Conte y los viceprimeros ministros Matteo Salvini y Luigi Di Maio y con un paquete posterior de enmiendas de la Liga al decreto fiscal La ofensiva del gobierno amarillo-verde para reformar las CCB ha comenzado oficialmente, uno de los trofeos del Gobierno Renzi creados en 2016 para afianzar el sistema de crédito cooperativo recomendado por el Banco de Italia desde hace algún tiempo.
Ante el colapso de muchos CCB pequeños, la idea del gobierno de Renzi había sido solicitar la agregación de los bancos cooperativos de crédito en torno a dos matrices nacionales (una liderada por Iccrea y la otra por Cassa Centrale Banca), a las que luego se sumó la agrupación Raiffeisen de los Bccs de Alto Adige.
Pero precisamente la agregación obligatoria en los holdings nacionales, salvo salir completamente del mundo del crédito cooperativo y transformarse en una sociedad anónima como hizo la toscana Bcc di Cambiano, nunca ha sido muy apreciada por los bancos del Norte cercanos a la Liga que en el final convenció incluso al Cinco Estrellas un desmantelar la reforma de Renzi en nombre de la soberanía bancaria mal concebido. De hecho, sus enmiendas parlamentarias anulan la obligación de unirse a un grupo nacional de CCB, haciéndola puramente opcional unos días antes de la fecha límite en la que los CCB individuales deben firmar el acta de adhesión o no a uno de los grupos nacionales.
Sobre la base de las propuestas parlamentarias de la Liga, los CCB podrán quedarse solos, con todos los riesgos financieros que pueden implicar tiempos tormentosos como estos y los que se anuncien tras el final del Qe. Como alternativa a la obligación de adherirse a un grupo nacional de crédito cooperativo, las CCB -si las enmiendas de la Liga Norte son aprobadas por el Parlamento- contemplan "la opción de adoptar sistemas de protección institucional".
La obligación de adherirse a grupos nacionales de crédito cooperativo se mantendrá únicamente para los bancos con fondos propios inferiores a 100 millones de euros, con un Common Equity Tier inferior a 8 puntos porcentuales o con un límite diferente indicado por el Banco de Italia, con un Net Ratio de Fondeo Estable menor a 100 puntos porcentuales, con Ratio de Cobertura de Liquidez menor a 100 puntos porcentuales y con Ratio de Morosidad mayor a 15 puntos porcentuales”. Pero es una ficción, porque no hay CCB que caiga por debajo de estos umbrales.