El control sobre el crédito es cada vez más estricto según los datos del Banco de Italia. En junio, los préstamos al sector privado registraron una contracción anual de 3,0%, lo que acentúa la contracción de 2,4% registrada en mayo. En particular, el crédito a las familias cayó un 1,0% en doce meses al igual que el mes anterior, mientras que el de las empresas no financieras disminuyó un 4,1% tras el -3,6% registrado en mayo.
La mayor selectividad en el desembolso del crédito ha permitido una leve baja en las tasas aplicadas. El tipo de interés de los nuevos préstamos a empresas no financieras de menos de un millón de euros desciende hasta el 4,30% (4,36% en el mes anterior), mientras que el tipo de interés de los préstamos por encima de este umbral desciende hasta el 2,77% (2,93% en mayo).
En cuanto a los préstamos concedidos a los hogares para la adquisición de vivienda, las tasas descendieron hasta el 3,90% (3,94% en mayo). En cambio, los correspondientes a nuevos desembolsos de crédito al consumo se mantuvieron sustancialmente estables en 9,55%.
Los préstamos incobrables también cayeron, según los datos contenidos en el Suplemento del Boletín Estadístico "Dinero y Bancos" elaborado por el Banco de Italia. La tasa de crecimiento de 12 meses de los préstamos incobrables fue del 22 % en junio, una ligera desaceleración con respecto al 22,4 % (revisado) de mayo, la más alta desde el comienzo de la serie en 1998.
Por último, la captación de capital por parte de los bancos italianos continúa satisfactoriamente. Los depósitos bancarios del sector privado volvieron a mostrar un aumento, del 6% en junio, aunque se desaceleraron desde el 7,1% anual de mayo.
