Cada vez son más las personas que utilizan Internet para gestionar sus cuentas bancarias. Desde una simple transferencia bancaria hasta el control de tus movimientos, bastan unos pocos clics para tenerlo todo bajo control. Sin embargo, la comodidad también conlleva riesgos, que los bancos italianos pretenden evitar invirtiendo en seguridad.
En 2018 los institutos han invirtió más de 300 millones de euros para garantizar "transacciones" digitales aún más seguras a los clientes. Así se lee en un estudio de Abi Lab, el centro de investigación e innovación del Banco impulsado por ABI. La misma cantidad, según las previsiones, también se gastará en 2019, incluso si "alrededor de la mitad de los bancos que respondieron esperan un aumento promedio (entre el 5 y el 15%) o significativo (más del 15%) en el gasto para los próximos 12 meses, ”, explica el informe.
Además de las implementaciones técnicas, los principales bancos italianos han promovido campañas de concienciación y colaboraciones intersectoriales, Como el CERTFin, una iniciativa cooperativa público-privada dirigida por la ABI y el Banco de Italia destinada a aumentar la capacidad de gestión del riesgo cibernético de los operadores bancarios y financieros.
En general, sin embargo, cada cliente puede hacer su parte, respetando 6 reglas simples que le permiten protegerse de fraudes y operar de forma sencilla y segura. Reglas útiles no solo para tratar con bancos, sino para todo lo que hacemos a través de una computadora, tableta o teléfono inteligente:
- cambiar periódicamente la contraseña de correo electrónico, redes sociales, banca por Internet y sitios para compras en línea;
- abrir correos electrónicos solo de direcciones conocidas;
- acceda a Internet solo desde su computadora;
- instalar o actualizar el antivirus;
- contener la difusión de información personal en línea;
- use diferentes contraseñas para diferentes sitios.