Menos dependencia de las agencias de calificación, nuevo capital de seguridad en caso de crisis, controles más estrictos sobre los riesgos derivados y sanciones más duras para los bancos que incumplan los requisitos de capital. Estos son los puntos clave de la propuesta de reforma de la directiva europea sobre requisitos de capital para los bancos. Ha sido presentado hoy por el Comisario de Mercado Interior de la UE, Michel Barnier. El propósito del borrador es hacer cumplir las reglas de Basilea 3 establecidas en la reunión del G20 en noviembre pasado. Se requiere la aprobación de los 27 estados miembros y el Parlamento Europeo para que las nuevas reglas entren en vigor. Más de 8.000 bancos y sociedades de inversión se verían afectados por la medida.
“No podemos permitir que se repita una crisis como la de 2008 –dijo Barnier– y no podemos permitir que las acciones de unos pocos bancos pongan en peligro la estabilidad financiera del mundo. El sector bancario necesita más capital e incluso capital de mejor calidad cada vez que se enfrenta a la asunción de riesgos. Además, las entidades de crédito no deben ser “demasiado dependientes del rating”, por ello uno de los objetivos es “suprimir en la medida de lo posible la referencia sistemática al juicio de las agencias”.
