Le Las decisiones de la EBA “han generado efectos perniciosos y han representado un potente combustible en la crisis de confianza como resultado de la turbulencia de los mercados soberanos". Esta es la opinión de Giuseppe Mussari, presidente de Abi, escuchado hoy en el Comité de Finanzas de la Cámara. En particular, el banquero se refirió a la "aplicación sustancial e inmediata de Basilea 3 y la aplicación de mark-to-market a las exposiciones soberanas mantenidas en el libro bancario".
Mussari luego subrayó que contemplar "una relación Core tier1 del 9% es más o menos análoga a una relación de capital común del 7%, según lo previsto por el Acuerdo a partir de 2019". Y en estas condiciones “es legítimo esperar que los posibles efectos recesivos relacionados con el proceso regulatorio de Basilea 3 han aumentado".
Por estos motivos, el número uno de la ABI subrayó que la asociación "está considerando la oportunidad de apelar ante el Tribunal de Justicia Europeo contra la recomendación de Eba", que "constituye de hecho una modificación de las normas de supervisión actualmente vigentes, dado que, por ejemplo, se eliminan los filtros prudenciales".
De esta forma "se ha sorteado una importante limitación prevista en el proceso de emisión de leyes y reglamentos en Europa -señaló Mussari-, a saber, el análisis preventivo del impacto de la regulación, que permite evaluar los costes y beneficios derivados de la introducción de nuevas normas".
En resumen, "hay que esperar que, también a instancias del gobierno italiano, habrá una modificación de la decisión del Consejo Europeo de 26 de octubre en cuanto a la metodología que subyace en la recomendación de la EBA, o al menos un aplazamiento de la fecha ahora prevista para su implementación”, es decir, el 30 de junio.
