“Decimos enfáticamente que Bagnoli será limpiado y curado. Se lo debemos a los napolitanos, a todos los ciudadanos italianos”. Así lo afirmó el Primer Ministro, Matteo Renzi, en el Palacio Chigi con motivo de la firma del protocolo de supervisión sobre los procedimientos para la recuperación de las áreas de Bagnoli. A la iniciativa asistieron el comisario de Bagnoli, Salvo Nastasi, el presidente de Anac, Raffaele Cantone, y el director general de Invitalia, Domenico Arcuri.
“Se acabó el tiempo de charlar – añadió Renzi -, si Bagnoli vuelve a empezar, Nápoles vuelve a empezar y todo el Sur vuelve a empezar”. El primer ministro explicó que el protocolo se firmó en el Palacio Chigi y no en Nápoles para "evitar las naturales controversias que, por evidente responsabilidad, siguen surgiendo cada vez que se menciona a Bagnoli". Y añadió: “Si no lo hacen quienes tienen que hacer las cosas, en particular las autoridades locales, depende de nosotros, y queremos hacerlo con los procedimientos anticorrupción más punteros”.
El primer ministro también ha señalado que “Bagnoli ha sido el mayor y más increíble desastre que ha tenido Italia en los últimos veinte años y hoy será la obra de remediación medioambiental más grande de Europa”. Renzi luego anunció que "durante la próxima semana se irán los primeros ecobales".
