Los fabricantes de automóviles coreanos están ganando terreno en el mercado estadounidense, preocupando a la industria japonesa, ya penalizada por un yen alto. En junio y julio de este año, Hyundai superó a Toyota en el mercado de vehículos medianos y de lujo. La empresa coreana vendió 7.189 Equus y Genesis en comparación con 6.745 Lexus con la insignia de Toyota.
Evidentemente el mercado internacional empieza a confiar en los modelos coreanos no solo para las gamas más bajas, sino también para los modelos más caros. Muestra evidente de esta evolución es el precio medio de las máquinas de Seúl vendidas en el exterior, que ascendió en el primer semestre del año a 13.499 dólares estadounidenses (+13,9% respecto al primer semestre de 2010).
El aumento se atribuye, comenta el Ministerio de Economía de Corea, a una mejor calidad del producto y al aumento en las compras de automóviles de mayor volumen, como sedanes grandes y vehículos recreativos. En los seis meses, la proporción de máquinas de motor pequeño de hecho disminuyó del 52,4% al 46,7%, mientras que el porcentaje de vehículos recreativos aumentó del 30,1% al 33,9%. "Evidentemente - comentó el ministerio - los fabricantes de automóviles coreanos están ganando competitividad a partir de la calidad y dejando atrás la imagen de productores de automóviles prácticos y económicos".
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