Otro ataque terrorista en Estambul. Esta vez atacado es el mayor aeropuerto de Turquía en ser atacado, donde ayer al menos 3 terroristas armados con Kalashnikovs abrieron fuego alrededor de las 22 horas en los controles de seguridad de la zona de llegadas del aeropuerto de Ataturk, provocando 42 muertos y 238 heridos (muchos están en estado grave, mientras que 109 ya han sido dados de alta). Poco después, se inmolaron durante un tiroteo con la policía.
El comando, según fuentes policiales, estaría formado por un total de 7 personas, de las que otras 3 estarían prófugas y una detenida. La autopsia de los cuerpos de los tres atacantes ha concluido. Su identidad aún no ha sido revelada, pero según fuentes de la investigación se trata de ciudadanos extranjeros, mientras que la persona detenida anoche por la policía turca bajo sospecha de pertenecer de alguna manera al comando es una mujer.
Sin embargo, las investigaciones, que apuntan directamente a la pista yihadista, están apenas en sus comienzos. Sin embargo, según el gobierno, todo conduciría a ISIS. Se escucharon al menos tres explosiones en el aeropuerto, una de las cuales está documentada en este video:
Las entradas y salidas del aeropuerto se cerraron de inmediato, mientras que varios vuelos entrantes se desviaron a otros lugares y los salientes se cancelaron. Entre las 41 víctimas confirmadas del ataque, además de los ciudadanos turcos, habría 5 saudíes -incluidos al menos 3 también con ciudadanía turca-, dos iraquíes, un tunecino, un uzbeko, un chino, un iraní, un ucraniano y un jordano.
El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, condenó el ataque, recordando que tuvo lugar durante el mes sagrado islámico del Ramadán. Mensajes de solidaridad han llegado a Turquía desde todo el mundo.
Hace apenas 20 días, Estambul fue golpeada por otro atentado con bomba cerca de la Universidad Estatal, que dejó 12 muertos y fue reivindicado por el grupo extremista kurdo Tak. En enero y marzo, otras 2 acciones terroristas atribuidas a ISIS: la del centro turístico de Sultanahmet, donde murieron 12 alemanes, y la de la calle comercial Istiklal, en la que murieron 4 turistas.
Otros 2 ataques este año golpearon la capital Ankara, con decenas de muertos, mientras que más de 100 personas murieron en el ataque del 10 de octubre contra una marcha pro-kurda, también en la capital turca. Ahora, este nuevo ataque también corre el riesgo de dar el golpe final al turismo, que en mayo había registrado su peor desplome desde 1994.
