Un ataque de piratería de enormes proporciones en Alemania. Los datos personales y documentos de cientos de políticos alemanes se han publicado en línea. Prácticamente todos los políticos del Bundestag -el parlamento alemán- estuvieron implicados con una excepción: sólo los representantes de Alternative für Deutschland (AFD), el partido de extrema derecha que obtuvo el 12,64% de los votos en las últimas elecciones, se "salvaron" y 94 diputados. Celebridades del espectáculo, el periodismo y la música también se vieron afectadas por el ataque de los piratas informáticos.
Números de teléfono, direcciones de correo electrónico, tarjetas de identificación, salas de chat e información de tarjetas de crédito publicadas en Twitter.
La canciller Angela Merkel también fue hackeada. Según ha revelado la prensa alemana, entre los datos de la canciller publicados online estarían su número de fax, su dirección de correo electrónico y la correspondencia enviada por ella y destinada a ella. Aún no se sabe si entre el material que terminó en la web también habría información sensible o si los datos publicados efectivamente corresponden a la realidad.
Según información inicial, el ataque de los hackers habría terminado a finales de octubre de 2018, pero no hay noticias de su inicio. Aún se desconoce a los responsables. La ministra de Justicia alemana, Katarina Barley, intervino en el asunto definiendo el hack un ataque "grave" a la democracia. “El autor del atentado –denunció el ministro– quiere dañar la confianza en nuestra democracia y en nuestras instituciones. No se debe permitir que los criminales y quienes los apoyan dicten el debate en nuestro país".
