Assonime pide al gobierno de Gentiloni que continúe "implementando con determinación las reformas ya decididas" y que trabaje para "reiniciar la inversión en infraestructura", un sector en el que "importantes fondos disponibles están bloqueados por trabas burocráticas". Esto es lo que escribe la Asociación de Sociedades Anónimas Italianas en una nota publicada después de la reunión de esta mañana del Consejo de Gobierno, que se celebró en la sede de Roma en Piazza Venezia bajo la presidencia de Maurizio Sella.
“Las intervenciones gubernamentales anunciadas en apoyo al sistema bancario –prosigue Assonime– han suavizado el clima de desconfianza en el sector”. El Consejo subraya, por tanto, “la necesidad de agilizar considerablemente los procedimientos de recuperación de la morosidad y de seguir estudiando soluciones de sistema para la gestión del stock existente”.
En cuanto a la situación política y económica, Assonime señala que “los últimos datos indican una aceleración positiva del crecimiento en Europa y en la zona del euro, en la que participa Italia, aunque más lentamente. Sin embargo, los temores de inestabilidad política, incluso en Europa, impulsaron al alza el diferencial de los bonos del gobierno italiano, mientras se consolida la tendencia alcista de los tipos a largo plazo. Entonces existe el riesgo de que la nueva presidencia de EE.UU. lleve a una fase de marcada turbulencia en las relaciones comerciales y financieras internacionales”.
Finalmente, ante la próxima expiración del mandato del presidente Maurizio Sella, que ya no puede ser reelegido, el Directorio ha designado el Comité de Sabios, que estará integrado por los ex presidentes Luigi Abete, Pietro Marzotto y Vittorio Mincato y que consultará a los asociados para la identificación de los candidatos a la presidencia de la Asociación.
