El cierre positivo de Wall Street (buenos datos del índice adelantado, de las ventas de viviendas usadas y de las prestaciones por desempleo) propició una jornada positiva en Asia, donde, sin embargo, el buen comportamiento de hoy no es suficiente para evitar un descenso durante la semana del MSCI Asia Índice regional del Pacífico. Sin embargo, este índice subió un 0,3% hacia el final de la jornada asiática. El Nikkei también subió (+0,1%), a pesar de que el yen había interrumpido su descenso, que en realidad había sido demasiado rápido (ayer había llegado a 118,7 frente al dólar): a primera hora de la tarde el japonés llegaba a 117,9. Detener el desmoronamiento del yen fue un comentario del ministro de Finanzas, Taro Aso, de que la depreciación en los últimos días había sido desordenada.
Una contribución al clima de calma estuvo a cargo del banco central chino, que intervino inyectando liquidez, y confirmando así la postura expansiva de la política monetaria. El euro se mantiene estable en los 1,255 frente al dólar, mientras que el oro vuelve a intentar el asalto a los 1200 y alcanza los 1191 $/onza. El crudo WTI vuelve a subir hasta los 76,3 $/b (79,6 para el Brent). Los futuros de Londres y Nueva York cambiaron poco.