Un imponente tiburón tigre de más de 3 metros y el esqueleto de un cachalote de unos 10 metros, ambos del siglo XIX, en la cripta del Museo Marino Marini de Florencia. Este es el escenario en el que los visitantes pueden sumergirse desde Del 1 de julio al 30 de septiembre con la instalación "Of Sharks and Whales", el nuevo proyecto de exposición - en colaboración con el Museo 'La Specola' del Sistema de Museos de la Universidad de Florencia – que pone en diálogo el pasado y el presente para llamar la atención del público sobre cuestiones ambientales e invitar a todos a una reflexión compartida sobre el futuro que se está construyendo.
El proyecto comisariado por Fausto Barbagli, conservador del Sistema de Museos de la Universidad de Florencia y presidente de la Asociación Nacional de Museos Científicos, ofrece, por primera vez en la sugerente cripta del único museo de arte contemporáneo de la ciudad, la exhibición de algunos hallazgos de la Specola, actualmente cerrada al público. La instalación presenta un paralelismo entre "ecosistemas culturales" y "ecosistemas naturales" que permite superar la tradicional dicotomía entre arte y ciencia, y pretende ayudar a concienciar e informar al público sobre los cambios ambientales y las consecuencias que la acción humana provoca en equilibrios naturales: desde la extinción de especies animales hasta la dramática propagación de virus, como acaba de ocurrir con la pandemia del Coronavirus.
El tiburón, en lo más alto de la pirámide alimentaria marina, encarna los miedos más ancestrales del hombre pero, al mismo tiempo que animal en peligro de extinción, expresa la urgencia de repensar el consumo del planeta. Su imagen -representación de la vida y la muerte, la extinción y la salvación- es profundamente contemporánea y, como es lógico, se ha convertido en un icono en la obra del artista británico Damien Hirst. Los huesos de ballena, presentados de manera "ilustrativa" en el suelo de la cripta, recuerdan expresiones artísticas vinculadas a la recomposición, en formas que van más allá de la idea misma de desintegración. La cita está dirigida a artistas, como Gino de Dominicis, capaces a través de la transformación artística de detener conceptualmente la irreversibilidad del tiempo.
El proyecto, que marca el reinicio de la programación expositiva del museo, que acaba de reabrir tras el cierre por la emergencia sanitaria del Covid-19, se acompaña del reseña "Fragmentos marinos", editado por el crítico de teatro roberto incerti, que con sus citas presenta una lectura-interpretación poética e intensa de la relación hombre-naturaleza y sus consecuencias, proponiendo extractos de la novela Moby Dick del escritor estadounidense Herman Melville.
El Museo Marino Marini de Florencia está abierto al público los miércoles y jueves de 18:30 a 22:30 y los domingos de 10:00 a 19:00.
Toda la información está disponible en www.museomarinomarini.it