A pesar de las dificultades relacionadas con el destino de la antigua Ilva de Taranto, que todavía posee incluso si Invitalia entró en el capital social con más de 1 millones de euros, ArcelorMittal está pasando un gran momento financieramente a nivel mundial. El primer grupo siderúrgico del mundo ha cerrado de hecho el mejor trimestre de la última década beneficiándose de la reanudación de la actividad industria después de la crisis sanitaria mundial y la aumenta el precio de las materias primas, especialmente de acero, en los mercados mundiales. El resultado es casi el doble de la utilidad neta en comparación con el cuarto trimestre de 2020 y un aumento del 15% en los ingresos: “El primer trimestre del año fue nuestro mejor trimestre de la década”, confirmó Aditya Mittal, el nuevo CEO del grupo designado en February e hijo del fundador, quien sin embargo dijo estar "consciente del desafío sanitario en curso en el mundo, especialmente en economías emergentes" como la India, que entre otras cosas se ha visto desbordada por la emergencia del Covid en las últimas semanas.
En un comunicado a la revista trimestral ArcelorMittal también aclaró algunas cosas sobre el destino de Taranto, cuyo poste de hierro y acero entretanto ha cambiado de nombre, tras la entrada de Invitalia, en acería italiana. La empresa, concluye la nota, “es el único en Italia que produce acero primario, fundamental para la cadena productiva mecánica nacional, la cual, como es sabido, representa una parte muy significativa del producto interno bruto”. Sin embargo, la situación en torno a las antiguas plantas de Ilva sigue siendo muy tensa: en los últimos días, los sindicatos Fiom CGIL y Uilm han confirmado el aplazamiento de la huelga inicialmente convocada para el 23 de abril en la planta siderúrgica de Taranto, con una guarnición de protesta frente a la Mise, hasta el próximo 11 de mayo, día en que el ministro Giancarlo Giorgetti ha convocado una cumbre en Roma, a primera hora de la tarde, con las organizaciones de ingenieros CGIL, CISL, UIL, Ugl y Usb.
Fiom y Uilm, sobre el acuerdo entre ArcelorMittal Italia e Invitalia, dicen que "en cuanto a las condiciones suspensivas necesarias para concretar la compra de las unidades de negocio de Ilva, según lo comunicado por ArcelorMittal, no parece haber ninguna duda relativa al 'acuerdo sindical ', en particular con respecto a revocación de despidos ya previsto. "La situación está al borde del colapso y ArcelorMittal es responsable de lo que está pasando”, dicen los sindicatos.