El acuerdo final aún no ha llegado porque el partido de Energía nuclear iraní cerrará el 30 de junio, pero el acuerdo alcanzado ayer por la noche en Lausana entre las potencias del "5+1" e Irán es un paso decisivo para alcanzar el acuerdo de punto de inflexión. Por el alto representante de la UE y exministro de Asuntos Exteriores italiano Federica Mogherini El acuerdo de ayer es “un paso histórico hacia un mundo mejor. Irán – explica Mogherini – ya no podrá desarrollar armas nucleares”.
ACUERDO DE LAUSANA - LOS PUNTOS DEL ENTENDIMIENTO SOBRE LA ENERGÍA NUCLEAR IRANÍ
En el acuerdo sancionado ayer entre el "5+1" (China, Rusia, Alemania, Francia, Reino Unido y Estados Unidos) y el representante de Irán, el Ministro de Relaciones Exteriores de Teherán Mohamed Jawad Zarif, se han fijado algunas claves de lo que será el acuerdo definitivo a firmar antes del 30 de junio:
- levantamiento escalonado y supervisado de las sanciones contra Irán;
- reducción de dos tercios del enriquecimiento de uranio;
- control por parte de inspectores internacionales de la suspensión del programa nuclear de Irán.
ACUERDO NUCLEAR IRÁN - REACCIONES POLÍTICAS
Todos felices menos uno. Así podríamos resumir el repaso de las primeras reacciones diplomáticas al acuerdo de ayer. De hecho, si el Secretario General de las Naciones Unidas ban ki luna aprueba el acuerdo argumentando que "el acuerdo contribuirá a la paz y la estabilidad en Oriente Medio", el Rusia muestra su satisfacción porque se ha reconocido "el derecho de Irán a un programa nuclear para uso civil". Cauteloso optimismo incluso para Barack Obama quien declara “Es un acuerdo histórico, evitará la bomba nuclear. Si logramos un acuerdo final, Estados Unidos, nuestros aliados y el mundo estarán más seguros. Si Irán miente, el mundo lo sabrá".
Enfurecido en cambio Benjamin Netanyahu, reciente ganador de las elecciones para la renovación de la Knesset, el parlamento israelí. 'Bibi' no ocultó sus preocupaciones ni siquiera a Obama, declarando que el acuerdo "pone en peligro la supervivencia de Israel" y que "abre el camino para que Irán adquiera una bomba atómica".
Además de esta preocupación de Netanyahu, la otra, quizás la verdadera, es que Israel no puede jugar un papel central en la arena de Medio Oriente. El acuerdo nuclear iraní no solo tiene un valor limitado al peligro evitado de la bomba atómica. Un acuerdo con Irán permitirá el cese gradual de las sanciones contra Teherán y la apertura hacia Occidente de un Estado hasta ahora atrincherado tras supuestos antiestadounidenses. Si el camino emprendido es el adecuado, el acuerdo con Irán podría revolucionar el frágil equilibrio político en toda la zona de Oriente Medio y abrir un nuevo frente económico hasta ahora impenetrable, pero sobre todo iniciar una nueva etapa en el escenario internacional. .