Las acciones de Telecom Italia estaban débiles en el Piazza a Piazza Affari, que al final de la mañana retrocedía algo más de dos puntos porcentuales, hasta los 0,932 euros, frente a un stoxx europeo que bajaba un 0,39%. Desde principios de año, la bolsa ha subido un 32%, mientras que en el último mes el balance es positivo en un 11%. El mercado se pregunta por el futuro de la telefónica a la luz de los últimos movimientos bursátiles.
Tras la solicitud de disolución de Telco por parte de los tres accionistas italianos (Intesa Sanpaolo, Mediobanca y Generali), esta mañana se ha sumado la noticia de la venta por parte de Telefónica del bono convertible por 139 millones de euros.
"La venta del convertible - explica Stefano Vulpiani de ICBPI -, incluso si está respaldada por la fuerte apreciación del bono, alimenta dudas sobre el futuro papel de Telefónica en la estructura accionarial de Telecom Italia, a la luz de la reciente escisión de Telco y las conocidas restricciones Antimonopolio en Brasil".
Andrea Devita, de Banca Akros, teme que la apuesta de Telefónica por el convertible pueda corresponder a un "compromiso" más bajo por parte del grupo español y esto "pudiera aumentar el atractivo especulativo de Telecom". "El movimiento es casi insignificante, sin embargo, podría indicar un replanteamiento estratégico de la inversión italiana", agrega.
Tras la escisión de Telco, Telefónica tendrá directamente el 14,8% de Telecom Italia. En noviembre compró el bono por conversión por 103 millones de euros para paliar la dilución de su acción por la conversión.