Esta vez la bolsa japonesa no debe su buen comportamiento (+0,8% para el Nikkei cerca del final de la sesión) al yen, ya que la moneda del Sol Naciente se encuentra aproximadamente en los niveles de ayer (117,8 frente al dólar). El aumento de los índices bursátiles en Tokio se debe a una serie de buenas noticias sobre la economía real (ver el lanzamiento a continuación). Fuera de Japón, los mercados asiáticos también son positivos, aunque solo ligeramente (el índice MSCI Asia Pacific ex-Japan gana un 0,1%).
Por supuesto, también ayudó el cierre positivo en Wall Street, donde, además de buenas noticias corporativas (Apple y Boeing), las nuevas prestaciones por desempleo cayeron a su nivel más bajo desde abril de 2000. En Japón, la política monetaria continúa con su curso ya fijado, sin mayor flexibilización: por lo tanto, tenemos una situación variada en las posturas de los bancos centrales. La Fed espera una próxima subida de tipos, Japón está estancado, mientras que otros bancos centrales, desde India hasta Canadá, Singapur, el BCE han tomado medidas expansivas: tipos más bajos y/o QE. El Banco de la Reserva de Australia también podría bajar la tasa clave, y la sospecha fue suficiente para llevar el dólar australiano al nivel de 78 frente al dólar estadounidense. El euro se fortaleció a 1,134 frente al dólar. El crudo se mantiene estable en el nivel de 44,7 $/b (WTI) mientras que el oro ha caído hasta los 1261 $/onza.