Recuerdas que Jordan Belfort, el "Lobo de Wall Street" interpretada en el cine por Leonardo Di Caprio, dirigida por Martin Scorsese? El comerciante sin escrúpulos de los años 80, detenido por estafa y blanqueo de capitales en 1996 (pasó casi 2 años en prisión) y ahora con 58 años, vuelve a la carga. Y lo hace en el momento adecuado, dado que en estos meses de emergencia por el Covid los mercados financieros parecen estar en auge y varias empresas están batiendo récord tras récord en Wall Street. Presintiendo el momento favorable, Belfort ha decidido lanzarse de nuevo a la lucha, uniéndose a la empresa de formación de comerciantes RagingBull (Raging Bull: otra película de Scorsese): quién mejor que él para entrenar a los halcones, o más bien a los "lobos" del futuro. ?
El financiero nacido en el Bronx, que en 1989 fundó la famosa firma de corretaje Stratton Oakmont (cinematográficamente y en otros aspectos), será por tanto profesor de trading, y sus lecciones se llamarán, para evitar dudas, "lecciones de mentalidad de lobo". Sin embargo, al no tener la licencia para ejercer la profesión de asesor financiero, Belfort no podrá dar a sus alumnos indicaciones precisas sobre las acciones a vender o comprar. Tendrá que limitarse a ser un gurú de las finanzas genéricamente, enseñando a los más jóvenes, según sus palabras, “a aprender de los errores”. El trader trainer es una actividad no regulada en EE.UU. y el do-it-yourself trading es un negocio que está explotando en los últimos meses, impulsado también por el auge de la plataforma Robinhood.
“Con el coronavirus – explicó el propio Belfort – los mercados financieros han visto la llegada de muchos nuevos traders, pero muchos de ellos no entienden nada. RagingBull es la única empresa que enseña esta actividad de la forma correcta, es decir, tal como se practica en el parqué de la Bolsa de Valores de Nueva York”. RagingBull se fundó en 2011 y la membresía cuesta $ 2.000 al año, incluso si algunos seminarios terminan costando la belleza de 14.000 dólares cada uno y la empresa casi te obliga a seguirlos. Un buen negocio, que ahora también podrá contar con los servicios de un viejo zorro como Jordan Belfort: aquel que en los 90, en pleno apogeo de su deslumbrante ascenso a príncipe de Wall Street, fue detenido por defraudar a pequeños inversores por más de 200 millones de dólares.
Mientras muchos de ellos todavía esperan ser compensados, Belfort se ha lanzado a varios negocios para reconstruir su vida: conferencias, marketing, incluso una marca de vodka con su nombre. Y ahora entrenador mental de los financieros del futuro. Y todavía hay quienes le creen….