El coche autónomo es una realidad: el 'Google car' ha anunciado que ha desarrollado el prototipo y está preparado para probarlo en carretera. Se ha hablado mucho de ello en los últimos meses, pero ahora ha llegado el gran momento y pronto, muy pronto, se podrán ver coches en la carretera que lo hagan todo, o casi todo, solos. “Pasaremos las vacaciones de Navidad ocupados con pruebas y controles”, promete un post publicado en el redes sociales Google+ “y en el nuevo año esperamos verlos conduciendo por San Francisco en nuestros autos”. Como ya adelantó una nota de prensa de la compañía californiana en mayo, el 'coche de Google' no tiene volante, acelerador ni pedales de freno: todo el trabajo lo hace el software desarrollado por Google y los sensores con los que cuenta el coche. . La intervención humana se limita a los botones "detener" y "continuar". La foto del prototipo muestra un automóvil económico blanco con líneas suaves y redondeadas, que recuerda vagamente a una mariquita. El tamaño reducido y la baja velocidad (el 'coche de Google' puede alcanzar un máximo de 40 km por hora) lo convierten en un coche urbano perfecto. “Hemos estado trabajando en prototipos de prototipos”, dice el portavoz de la compañía, “cada uno diseñado para probar diferentes partes del automóvil o aplicaciones de software individuales”. “Finalmente”, continúa, “todos estos sistemas se han unificado y hecho que interactúen entre sí, dando como resultado un vehículo totalmente funcional: el primer coche que se conduce solo”. Automatizar algunas funciones de conducción, como el aparcamiento, no es nada nuevo y varios fabricantes de coches ya lo han hecho, pero lo que ofrece el 'Google car' es verdaderamente revolucionario. "Si el automóvil de Google tiene éxito y se generaliza", dice Mike Hudson de la firma de investigación de mercado eMarketer, "transformará el mercado automotriz como el teléfono inteligente transformó el mercado telefónico".
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