La ley de presupuesto 2023 ha aumentó en 4 mil millones en comparación con los recursos asignados al Servicio de Salud en mano, alcanzando los 128 mil millones de euros. Cifras en mano, de estos recursos adicionales, 1,4 millones se utilizarán para cubrir los mayores costos de las fuentes de energía mientras que 200 millones se utilizarán para aumentar los salarios de los operadores de salas de emergencia. “Aunque contando con un aumento sustancial de fondos, en comparación con la experiencia de los años anteriores a Covid cuando la financiación aumentó en mil millones al año, es solo un 3 por ciento más a pesar de lainflación alcanzó casi el 12 por ciento anual en noviembre", señala el Observatorio del IPC en su último número publicado el 5 de enero.
La evolución del gasto sanitario público italiano desde 2000
El gasto en 2023 aumentará en términos nominales desde el período anterior a Covid por ben 15 mil millones, alcanzando los 131 mil millones. Sin embargo, si se considera el gasto en salud en términos reales (es decir, ajustado por inflación), el aumento en los años de la pandemia se ve compensado por el repunte de la inflación y "el gasto, valorado a precios constantes, vuelve ligeramente por debajo de los valores de 2019”, señala el Observatorio.
Extendiendo la mirada al largo plazo, entre 2000 y 2023 el gasto público en salud casi se duplicó en términos nominales, aumentando de 68 a 131 mil millones de euros. Sin embargo, si se incluye la inflación en el cálculo, el porcentaje de aumento es igual a +19%.
En términos reales, todo el aumento se produjo en los primeros años del siglo. Luego, tras la crisis financiera de 2008 y la posterior crisis de la deuda soberana en Europa, “observamos una reducción seguida de un largo período de estabilidad, que terminó recién en 2020 con la explosión de la pandemia. Este aumento en términos reales desde el año 2000 probablemente no sea suficiente para mantener el ritmo de la creciente demanda de servicios de salud. Baste decir que en los últimos 20 años los mayores de 65 años se han incrementado en 2,5 millones”, observan los expertos, que subrayan que desde hace tiempo la ley de presupuestos ha ido destinando fondos adicionales para la sanidad respecto a lo ya previsto . “Una mala práctica” que impide a los operadores planificar actividades para los próximos años” y refleja el estado de gran precariedad de las finanzas públicas.
Se obtienen consideraciones similares observando el relación entre el gasto en salud y el producto interno bruto: entre 2000 y 2009, la relación gasto/PIB pasó del 5,5% al 7,1%. En los años siguientes se intentó un arduo viaje de regreso. En 2023 bajaría al 6,6 por ciento, que en todo caso sigue siendo uno de los valores más altos de los últimos veinte años.
Pnrr y salud
"La reducción en términos reales de la financiación y del gasto sanitario corriente con respecto a 2022 va, sin embargo, acompañada de los recursos y reformas previstos por la Misión Sanitaria (M6) de la Plan Nacional de Recuperación y Resiliencia (PNRR)”. en numeros es 15,6 millones de euros a destinar a sanidad a los que se suman los recursos incluidos en el resto de misiones.
El número seis se trata de difundir nuevos modelos para la protección de la salud mediante el desarrollo de diversas innovaciones organizativas. Por un lado, el desarrollo de redes de proximidad, estructuras intermedias y telemedicina para la asistencia sanitaria local; por otro, el fomento de la innovación, la investigación y la digitalización del Servicio Nacional de Salud.
En materia de reformas, el DM 77/2022 e incluso antes el Decreto del Ministerio de Sanidad de 10 de julio de 2007 (y por tanto mucho antes del PNRR), habían comenzado a implantar el modelo de casas de salud, es decir, estructuras polivalentes capaces de proporcionar todos los servicios sociales y de salud en una misma estructura Sin embargo, el Subsecretario de Estado de Salud, Marcello Gemmato, ha expresado repetidamente sus perplejidades con respecto a la cuestión de las Casas Comunitarias y los Hospitales Comunitarios argumentando que, una vez los fondos del PNRR se han agotado, se volverá insostenible financiar los enormes costos de mantenimiento de los mismos.
“El principal problema se refiere a la necesidad de personal para la implementación de la reforma, cuyo gasto debe ser financiado por el requerimiento estándar nacional de salud”, explica el Observatorio del IPC. De hecho, la Misión 6 prevé 1350 Casas Comunitarias, 600 Centros de Operaciones Territoriales y 400 Hospitales Comunitarios para un total aproximado de 18.350 enfermeras, 10.250 personal de apoyo, 2000 trabajadores sociales y sanitarios y 1350 trabajadores sociales. Para el subsecretario, la solución óptima sería enfocarse en fortalecer la red de médicos de familia y farmacias ya presentes en la zona, evitando así la creación de duplicados como los hogares y hospitales de la comunidad con todos los problemas críticos que tendrán. . Esta posición contrasta con una visión alternativa que ve a los médicos generales como actores clave en los nuevos hogares y hospitales comunitarios. “En el frente de la reforma de la medicina territorial, sin embargo, no hay grandes avances por el momento”, concluyen los expertos.