Para no detener el futuro y gobernarlo, no necesitamos un impuesto a los robots, sino todo lo contrario, es decir, incentivar a quienes invierten en tecnología, innovación y formación, mediante la reducción de los impuestos sobre el trabajo. Justo al revés de la receta de Salvini, que con esta propuesta quiere gravar las empresas, penalizando sobre todo a las pequeñas y medianas, es decir, aquellas que gracias a inversiones tecnológicas aprovecharían la tecnología necesaria para ser competitivas, porque el coste de El trabajo por unidad de producto es mayor cuanto más pequeña es la empresa.
Quizás el secretario de la Liga no lo sepa, pero en estos años de crisis muchos de los convenios sindicales que hemos hecho para mantener el trabajo en Italia, o para traerlo de vuelta –reshoring– han visto la inversión en tecnología como principal palanca. para relanzar el trabajo y la ocupación.
La respuesta por tanto no es gravar a los robots sino desgravar el trabajo reduciendo de inmediato la cuña fiscal que hoy en nuestro país es 10 puntos superior a la media europea.
Entiendo que dados los datos, la consternación de que el debate sobre el migrante como objeto de miedo se está acabando, da pie a que Salvini necesite encontrar otros símbolos para sembrar el miedo y atesorar el odio en las urnas. Pero la tecnología puede ser una gran aliada para la humanización del trabajo y el retorno de muchas producciones deslocalizadas.
°° El autor es el Secretario General de Fim-Cisl
44 años, nacido en Conegliano Veneto (TV), fue elegido Secretario General de Fim Cisl el 13 de noviembre de 2014. Casado con Silvia, tiene una hija de 6 años, Emma. Ingresó a Fim Cisl en 1994, luego de años de trabajos precarios y estudios económicos. A los 24 años, entre 1994 y 1997, en la Fim Cisl fundó la Red de Trabajadores Metalúrgicos (NGM), con la idea de que el gremio volviera a ser "un lugar público de las mejores aspiraciones de los jóvenes", apoyando la idea que los jóvenes activistas deben ser representantes e "interceptores de personas y necesidades" en el lugar de trabajo. Fue de los primeros en llevar la iniciativa sindical a la red al lanzar NGM también en internet, ya en 1997. En esos años, con los jóvenes de la Fim, consiguió la reapertura de la escuela de formación sindical en la Romitorio di Amelia (TR). En el período comprendido entre 1998 y 2001 adquirió experiencia en Bolognina (Bolonia) siguiendo empresas del sector; luego se convirtió en Secretario Provincial. En 2001, se trasladó a Ancona, todavía como Secretario Provincial, y se hizo cargo de las principales empresas mecánicas de la zona, incluidas Fincantieri, Fiat-CNH y Caterpillar. En 2008 pasó a la Secretaría Nacional, donde de inmediato se dedicó a la democracia industrial y la participación impulsando el Protocolo de Relaciones Laborales de Finmeccanica y la propuesta de Fim Cisl sobre la participación de los trabajadores en la gestión empresarial estratégica, presentada el 23 de octubre de 2013 en Cnel. Siguió el sector del acero y el aluminio y abordó las disputas más difíciles de los últimos años (Alcoa, Lucchini, Ilva, AST, Indesit Whirlpool) provocadas por la crisis, criticando a la clase dominante por su incapacidad para abordar el tema de las políticas industriales. Autor de numerosos artículos y libros, fue el primer sindicalista en Italia en abordar el tema de los cambios en la industria con el advenimiento del Internet de las Cosas, del que habla en #Sindacatofuturo en Industry4.0 (Ediciones Adapt Press), en El libro "La gente y la fábrica" (Guerini NEXT editions), la mayor investigación sobre los trabajadores de Fiat Chrysler en los últimos años en Italia, realizada por Fim Cisl en colaboración con el Politécnico de Milán y Turín, reivindica el papel y los resultados de los acuerdos firmados por Fim Cisl en el grupo Fiat (hoy FCA). Es un firme partidario de la necesidad de avanzar en el sindicato. Esta es su visión: “Necesitamos un sindicato 2.0 que aúne los mejores valores y la tecnología y sobre todo el relanzamiento de la formación de mandos intermedios a todos los niveles. Internacionalizar, desburocratizar, rejuvenecer el sindicato”. Alérgico a los rituales y al sindicalismo, estricto con la transparencia y la gestión organizativa, cree que en una economía globalizada la acción sindical, para tener éxito, debe necesariamente adquirir una dimensión internacional. "La unión -repite siempre- o será internacional o no será"