Los minoristas de segunda mano y las pequeñas empresas de sastrería especializadas en arreglos de ropa son algunos ejemplos de negocios exitosos. en un clima de desaceleración económica y disminución de la confianza del consumidor en Corea. Es una tendencia en constante aumento para un país que lucha contra la inflación y el aumento de los costos relacionados con las hipotecas y los préstamos personales.
En tiempos de recesión, por lo tanto, los coreanos se han entregado a la compra de objetos usados, especialmente productos electrónicos de consumo, muebles y juguetes.
También el negocio ligado al reciclaje va muy bien, con una facturación cada vez mayor para las empresas que realizan el 'restyling' de ropa y calzado. Finalmente, las empresas que arriendan productos, con opción a compra posterior, han visto dispararse su facturación. Entre los objetos más exitosos se encuentran purificadores de agua, bidés, laptops y PC.
El negocio es tan popular que cada vez más coreanos también recurren a estas empresas para alquilar cunas, cochecitos, bolsos de diseñador y abrigos de piel.
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