JP Morgan, Citigroup y Wells Fargo cierran el tercer trimestre con beneficios a la baja, pero el resultado sigue por encima de lo esperado. El primero, el más grande de EE. UU. por activos, registró una caída interanual del 7,6 % en los beneficios (de 6,8 millones de dólares a 6,29 millones de dólares). El descenso, explica el banco, está ligado principalmente a las cargas fiscales, mientras que en el mismo periodo del año pasado el grupo había registrado un beneficio fiscal de 2,2 millones.
Las ganancias por acción cayeron a $ 1,58 desde $ 1,68, frente a las expectativas de $ 1,39, mientras que las ganancias antes de impuestos aumentaron un 32,8% a $ 8,94 mil millones, ayudadas por costos más bajos y un ligero aumento en los ingresos a raíz del aumento de tasas decidido por la Reserva Federal en diciembre pasado. , el primero desde el comienzo de la crisis financiera.
En cuanto a Citigroup, la firma de servicios financieros más grande del mundo, reportó ganancias de $3,84 millones ($1,24 por acción), un 11 % menos que los $4,29 millones ($1,35 por acción) del mismo período de 2015. Los analistas habían pronosticado ganancias de $1,16 por acción. Los ingresos cayeron de $ 18,69 mil millones a $ 17,76 mil millones, nuevamente mejor que el pronóstico de $ 17,36 mil millones.
Los activos comerciales, excluyendo los ajustes contables, aumentaron un 16% a $4,13 millones de $3,57 millones en el mismo período del año pasado. Los ingresos de la división de banca de inversión aumentaron un 15%, de $944 millones a $1,09 millones, mientras que los gastos cayeron un 2% a $10,4 millones, desde $10,67 millones hace un año.
También Wells Fargo vio caer las ganancias en el tercer trimestre, aún superando las previsiones de los analistas. El banco de San Francisco reportó ganancias de $5,64 millones, $1,03 por acción, frente a $5,8 millones, $1,05 por acción, en el mismo período del año pasado. En cambio, los analistas esperaban una ganancia de 1,01 dólares por acción. Los ingresos aumentaron a 22,33 millones de dólares, más de lo que pronosticaron los analistas (22,21 millones de dólares).
El banco pagará una multa de $185 millones por permitir aparentemente a sus empleados abrir 2 millones de cuentas de depósito y tarjetas de crédito sin la autorización del cliente para cumplir con las metas de ventas: un escándalo que afectará los balances de los próximos trimestres.