La Liga no quiere a Berlusconi como candidato a presidente del Gobierno y se desvanece el acuerdo electoral con el PDL. En la cumbre que iba a decidir el acuerdo electoral, Maroni no se presentó y mandó por delante al exministro Calderoni: una clara señal de que la Liga quería desmarcarse del partido del expresidente y de hecho el resultado de la reunión fue decepcionante. Tanto Berlusconi como Alfano dijeron que no han perdido toda esperanza de acuerdo pero que el camino es cuesta arriba.
Mientras tanto, estalla el caso Passera en el Centro, tras la disputa entre el ministro de Fomento y el líder de la UDC Pierferdinando Casini por la lista única: Passera argumentó que la presentación de listas separadas es una señal de debilidad y dijo que no estaba dispuesto presentarse como candidato. Ahora veremos quiénes pasarán por el guante de Enrico Bondi, a quien Mario Monti, que liderará la coalición del Centro a partir de su Agenda, ha encargado el examen de las candidaturas de la asamblea. Sobre todo, crujen las posiciones de Fini y Cesa.
Por la izquierda, el Pd descarta la posibilidad de nominar a los actuales ministros en las elecciones y brinda en cambio por la candidatura del fiscal nacional antimafia, Piero Grasso, quien debe sin embargo recoger el primer ataque de izquierda por parte de Ingroia, quien polémicamente recuerda que Grasso quiso premiar a Berlusconi en el pasado por la batalla antimafia de su gobierno.
La campaña electoral acaba de empezar pero ya se está calentando día tras día.