?A disminución significativa en los préstamos a un día – por la duración de un solo día hábil – de las entidades de crédito de la zona del euro al Banco Central Europeo. En concreto, pasó de 452,034 millones de euros el martes 27 de diciembre a 436,583 millones ayer.
La caída, aunque positiva, no cambia en ningún caso las consideraciones relativas a la actitud de los bancos europeos en esta coyuntura económica y financiera: en primer lugar, la decisión de depositar el exceso de liquidez en las arcas del BCE, revela el clima de fuerte incertidumbre y aversión al riesgo afectando a las instituciones financieras. Y esto congela el mercado de crédito interbancario.
El BCE, con la sustancial inyección de fondos de hace unos días, se fijó indirectamente el objetivo de garantizar una mayor facilidad en la transmisión del crédito a empresas y particulares. Pero los bancos han vuelto a depositar gran parte de los préstamos recibidos en el Banco Central, cancelando así parcialmente el efecto deseado. Más relevante fue el disminución de los préstamos, que ascendió a 4,321 millones de euros frente a los 6,225 millones de la sesión anterior.
